Archivo del blog

viernes, 28 de octubre de 2022

EL PAPEL DE LA FAMILIA Y LOS EDUCADORES, EN LA ALIMENTACIÓN PREESCOLAR

Sería un error pensar que todo lo que los alumnos aprenden forma parte del currículo, hay otras formas de aprendizaje no escritas, entre ellas la imitación, y en esta edad sus dos modelos de identidad fundamentales son sus padres y sus profesores. Hay otros ámbitos de influencia que no podemos desdeñar su importancia como son los medios audiovisuales, en este campo de la alimentación.

Los niños aprenden por imitación, por ello el papel de los padres y maestros en la educación alimentaria es determinante, también influirán en él sus compañeros y amigos, la publicidad en los medios de comunicación, en particular la televisión y TICs.

Siempre se trata que los alumnos adopten estilos de vida saludable, y es en esta etapa infantil cuando más se puede y se debe incidir en dicha disciplina, debido a las características de maleabilidad y aceptación de nuevos patrones de conducta.

Las interacciones del niño con su medio ambiente, y en especial con el encargado de su cuidado —la madre o quien hace sus veces—, cobran particular importancia en los primeros años de vida. Las características de este vínculo afectivo pueden favorecer o afectar negativamente en la formación de gustos y rechazos.

Es que los Padres y educadores deben crear unos hábitos alimentarios saludables durante la infancia, contribuyendo a un correcto crecimiento y desarrollo de los niños, lo cual es fundamental para evitar enfermedades crónicas en la edad adulta, "Se come en función de lo que comen los mayores" [3], y tras nuestra reflexión añadiríamos: "... y permiten los mayores".

Los gustos y preferencias alimentarias

 En este proceso de aprendizaje e introyección de hábitos alimentarios es muy importante el rol materno en la forma como el niño comienza a generar la aceptación a un alimento o el rechazo, si bien es cierto que en la elección alimentaria existen determinantes biológicos o predisposiciones genéticas como la preferencia innata por los sabores dulces y la aversión por los sabores amargos (Rozin, 1995: 87-89); como quiera que sea, la gran mayoría de las preferencias y rechazos son aprendidos en el proceso de crianza.

Porque si desde la infancia se adoptan y promocionan buenos hábitos alimentarios, estos favorecerán la práctica de un estilo de vida más saludable en la edad adulta, previniendo patologías como las conocidas obesidad, diabetes, hipertensión, enfermedad cardiovascular y cáncer.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

PEDAGOGÍA CRITICA

¿Qué es la pedagogía crítica? La pedagogía crítica es una orientación de la pedagogía que sostiene que la enseñanza no es un proceso neutral...